
En el segundo período destacó la labor de Jaime Diéguez, cuya dirección mejoró el juego leonés. El Baloncesto León apostó en este cuarto por sacar a los pívots rivales de la zona y jugar con los aleros en el poste bajo.
Tras el descanso Unelco volvió a imponer su fortaleza interior con un excelente Patrick Gnagbo (25 puntos y 14 rebotes), aunque Baloncesto León logró igualar el partido a 55 bajo la sabia batuta de Jorge Calvo.
El partido se dirigía a un final apretado y así el último cuarto estuvo marcado por los nervios y la igualdad. A falta de dos minutos para la conclusión León se puso por delante por tres puntos, su máxima ventaja del partido, y el Unelco CajaCanarias falló una bandeja en contrataque. Tras la canasta del equipo leonés (cinco de ventaja), Unelco preparó una jugada para Willy Koutouan que consiguió anotar y forzar falta. Tras lanzar a fallar, el equipo tinerfeño consiguió el rebote que le daba la opcíón de empatar pero el tiro de Iñaki Díaz no entró y la posterior falta la convirtió León manteniendo su excelente nivel de acierto en los tiros libres (anotó los últimos seis) lo que le otorgó la victoria final por 78 a 70.